Buscando en Google alguna definición elaborada de “mission statement”, me encuentro con esto:
Pass the Mother Test: Show your mission to your mother, if she does not understand it, start again.
O sea, que si tu madre —y no tu padre— lo entiende es que está a prueba de “mentes simples”. ¿No?
Una conversación entre dos adolescentes de unos 13 o 14 años del cole de Ana que esperaban el transporte público:
—Y la vecina vino a decirle a mi madre “Creo que sus hijos piensan que a mi perro le gusta el pollo, y no le gusta. Y tiene que decirles que dejen de tirar carne a la piscina, porque se puede a atascar”.
El amigo se doblaba de la risa. Y el narrador prosiguió:
—Y mi madre le dijo “Es que mis hijos son unos cabrones”. Y me hizo ir a pedirle perdón, menos mal que no estaban en casa.
Luego empezaron a hablar de un amigo común que siempre “ponía los cuernos” a las chicas, y añadió:
El otro día, reviendo “Una mujer bajo la influencia” (1974), nos fijamos en uno de los hijos, el niño de la foto de arriba. ¿De qué nos sonaba? Claro, salía en La casa de la Pradera. Era Albert (Matthew Laborteaux), el huérfano que adoptó la familia Ingalls. Resulta que también en la vida real fue adoptado. Mathew nació con autismo.
Por lo menos en Estados Unidos, puede que los colegios puedan hacer más por una buena alimentación infantil que los propios padres. Un estudio ha desvelado que los niños de 5 y 6 años ganan más peso durante las vacaciones de verano que durante todo el año escolar. Para averiguarlo, analizaron la masa corporal de los niños de más de 5.000 escuelas infantiles de todo el país desde 1998 hasta el 2000.
Doug Downey, sociólogo de la Universidad del Estado de Ohio y coautor del estudio, dice que para muchos chavales los días de verano pueden ofrecer demasiado tiempo libre para comer aperitivos y pasar el rato viendo la televisión o con los video juegos. A Downey se le ha pasado por la cabeza la “brillante” idea de que quizás la solución es alargar el año escolar y aumentar las actividades extraescolares (¿para mantener a los niños “a salvo” de la mala influencia de los padres?).
Betsy A. Keller, una profesora de ciencia del deporte y ejercicio de Nueva York se pregunta qué hacen los padres con sus hijos. «Después de todo, son niños de 5 y 6 años, así que no van a la tienda de comida. Son sus padres los que la eligen».
El estudio aparecerá en el número de abril del American Journal of Public Health.
Nos vamos de vacaciones. La idea es no volver a tocar un ordenador hasta finales de mes. ¡Buen carnaval!
Gran Bretaña es el país desarrollado donde la infancia disfruta de una peor calidad de vida, según un informe que acaba de publicar UNICEF. Se analizaron 40 indicadores de la vida de los niños de 21 países industrializados y este fue el sospechoso orden hallado:
1. Países Bajos
2. Suecia
3. Dinamarca
4. Finlandia
5. España
6. Suiza
7. Noruega
8. Italia
9. Irlanda
10. Bélgica
11. Alemania
12. Canadá
12. Grecia
14. Polonia
15. República Checa
16. Francia
17. Portugal
18. Austria
19. Hungría
20. EEUU
21. Reino Unido
¿España en quinto lugar, por encima de Suiza y Noruega? Hay que mirar la letra pequeña. Por ejemplo, ganamos muchos puntos con lo de “bienestar subjetivo”, pero estamos a la cola en “bienestar educativo”.
El informe (Un panorama de bienestar infantil en los países ricos) está en varios idiomas (incluído el español) y se puede descargar aquí.